Espuma hidratante de rosa mosqueta

Para hidratar la piel tras el lavado o la exfoliación con el jabón de rosa mosqueta, he hecho una espuma de noche que además de tener unas propiedades exquisitas, por los ingredientes que la forman, huele de maravilla.

La pócima está compuesta por:

• Agua de rosas: que tiene propiedades hidratantes, anti-inflamatorias, reafirmantes, descongestionantes, tonificantes y calmantes entre otras muchas, incluso aseguran que tiene poderes afrodisíacos.
• Cera de abejas de apicultor: contiene gran cantidad de vitamina A, es suavizante y frena el envejecimiento.
• Aceite de almendras dulces: resulta emoliente, suavizante, hidratante y nutritivo.
• Aceite de rosa mosqueta: Regenera la piel y le aporta vitamina C.
• Aceite esencial de naranja dulce (ecológico): es sedante, relajante y le atribuyen en aromaterapia propiedades antidepresivas.

La textura es similar a un suerum, más clarita que la crema. Se aplica antes de irte a dormir, especialmente, porque las cremas actúan muchísimo más si las usas a partir del atardecer, o por lo menos eso cuentan las leyendas de la gente sabia en este tema, porque la piel al estar expuesta a menos tóxicos ambientales, disminuye su barrera defensiva, absorbiendo y nutriéndose más tranquilamente.

Así que con el tiempo en el que vivimos, de prisas, trabajo, maternidad... suerte si tenemos un minutín para ponernos la crema, como para arriesgarnos de gastarlo por la mañana  y que no nos haga efecto, ;-).