Reflexiones de una mamá imperfecta

Hoy os miro y me parecéis los niños más preciosos de la tierra. Cada día que pasa continuamos compartiendo nuestras vidas, cada día descubrimos cosas nuevas y aprendemos mutuamente, cada día os voy observando crecer y nos vamos acompañando en la rutina, en las prisas, en los momentos de calma, de abrazos y cosquillas.

Vuestra energía inunda nuestra casa, tanto que a veces tengo que esconderme en el baño para respirar un poquito, porque me desborda. Pero transmitís tanta vida, tanta felicidad, me enseñáis tanto cada día. Jamás me había preguntado tantas veces si lo estaba haciendo bien, jamás había analizado tanto mis actos, ni me había sentido tan responsable. Soy vuestra mamá, una de las figuras de referencia más importante y sabéis una cosa: ¡no soy perfecta! Pero me ayudáis un montón en hacerlo cada día un poquito mejor.

Noa, me encanta cuando me dices que lo importante en la vida es que seamos todos muy felices, o cuando tras una "pequeña consecuencia negativa" (castigo), me comentas que las cosas no se solucionan así, que se arreglan hablando , y te tengo que recordar, que ya lo habíamos hablado muuuuchas veces y parece que no lo habías entendido o yo no me había explicado lo suficientemente bien, jijiji. O cuando me ayudas a que Juan comprenda mejor las cosas y me dices que no me enfade con él que se pone triste.

Juan, me encanta tu intensidad, cuando este verano te quedaste casi sin voz, por cómo gritabas de emoción al ver cosas nuevas para ti. Tienes una mirada tan increíble, tan despierta. Te gusta tanto descubrir el mundo, eso sí, muy cerquita de nosotros, todavía te cuesta mucho cortar el cordón umbilical que nos une. Pero tranquilo, no hay prisa, mamá te acompañará de cerca hasta que tú te sientas preparado. Y luego te seguiré acompañando pero ya dejándote el espacio que necesites.

Es curioso, sois tan diferentes, y a la vez os complementáis tan bien... Da gusto ver como jugáis, como preguntáis el uno por el otro y como queréis ir siempre juntos. Los intentos de hacer ratitos especiales para cada uno por separado, parece que no os han convencido demasiado.

Hoy os miro y me siento orgullosa de ser vuestra madre.






Comentarios

  1. Es que es para estar orgullosa...felicidades por esa maternidad ya asumida, que al principio todo parece muy bonito y luego te das cuenta que... ¡oh, my god!
    Yo me consuelo pensando: total, hasta que ellos no sean padres no valoraran lo que hago por ellos. Asi que intento hacerlo lo mejor posible y que el Universo provea.

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    1. Gracias cielo, qué intenso y difícil es esto de la maternidad!! Pero seguiremos aprendiendo día a día. Con ayuda del universo claro, jajajaja. Y de las buenas amigas ;).

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